BENEFICIOS DEL AUTOCONSUMO ELÉCTRICO

La primera ventaja del autoconsumo es el ahorro: al producir parte de la energía consumida, la factura eléctrica del consumidor se puede reducir un 60-80%. Si además tenemos en cuenta la subida continuada de los precios de la electricidad (un 40% desde 2005), producir energía resultará más rentable que comprarla, según calcula el Instituto para el Ahorro y la Diversificación de la Energía.

Una segunda ventaja del autoconsumo es que, como la electricidad no recorre grandes distancias, se evitan las pérdidas de energía en la red. Conviene recordar que, con el actual modelo de generación centralizada, un 10% de la energía eléctrica se pierde durante el transporte y la distribución, con un coste anual de 2.000 millones de euros.

Un tercer beneficio del autoconsumo es que la producción se realiza con tecnologías limpias, lo cual reduce el uso de combustibles fósiles y la dependencia energética. En este sentido, la energía fotovoltaica se presenta como la fórmula más adecuada para generar electricidad destinada al autoconsumo en los hogares por varios motivos:

     – Su avanzado nivel de desarrollo, que permite conectar directamente las placas solares a la

       red doméstica.

     – Los precios de las instalaciones han bajado respecto a años anteriores.

     – Y el hecho de que la electricidad se produce de día, que es cuando más se consume.

En cuarto lugar, el autoconsumo fomentará el empleo y la actividad económica en el sector de las energías renovables. Su implantación aumentará la demanda de paneles solares y permitirá la creación de empresas locales de servicios energéticos para instalar y mantener las centrales domésticas.